Aunque el verano sea un periodo consagrado al descanso y a la diversión, es necesario dedicar algún momento del día a realizar algún tipo de actividad escolar.
➤ Es importante que las tareas sean personalizadas, es decir, adaptadas a las preferencias y necesidades del niño. Para ello, es aconsejable tener en cuenta las sugerencias de sus profesores.
➤ Por regla general, a partir de los 6 años, es conveniente dedicar un tiempo de entre 15 y 30 minutos (según la edad) a leer un libro que le motive y a escribir textos sencillos como, por ejemplo, un diario de viaje, postales para la familia o los amigos, etc.
➤ También es adecuado realizar actividades de ocio enriquecedoras culturalmente, como ir de excursión para conocer la naturaleza en vivo, visitar museos, asistir a conciertos, etc.
➤ Para establecer una cierta rutina y evitar los descuidos, es aconsejable hacer los deberes siempre a la misma hora.